Ha fallecido en Sotayaga (Tokio), el mismo día en el que su último trabajo, "Labyrinth of Cinema", tenía que haberse estrenado de no haber sido aplazada su llegada a las pantallas por culpa del coronavirus. A Nobuhiko Obayashi, de 82 años, le habían diagnosticado cáncer terminal dos años antes, pero siguió trabajando en silla de ruedas para finalizar su último trabajo.
Nacido el 9 de enero de 1938 en Onomichi (Hiroshima), su infancia estuvo marcada por la II Guerra Mundial, y por las secuelas psicológicas en la población de los efectos de la primera bomba atómica. Aunque empezó a estudiar medicina, decidió cambiarse a Artes en la Universidad de Seijo, con el objetivo de dedicarse al cine. Al acabar, inició una etapa en el cine experimental, con cortos y mediometrajes como la surrealista Dandanko, de 1960, donde usó la técnica del 'stop-motion'. Tras Confession, de 1968, decidió dedicarse a los anuncios publicitarios, varios de ellos con Kirk Douglas y Charles Bronson, que al no poder pronunciar con corrección su nombre, lo acortaron como "Ob", apodo por el que iba a ser comúnmente conocido en la industria.
En 1977 la productora Toho recluta a Nobuhiko Obayashi para estar al frente de Hausu, film de terror protagonizado por una estudiante que se llevaba a cinco compañeros de clase a la casa de su tía, que resultaba estar embrujada. Obtuvo una gran repercusión en todo el mundo. A partir de ese momento se prodiga en largometrajes, como Estudiantes de intercambio, donde dos jóvenes invocan a métodos sobrenaturales para realizar un experimento y como resultado él empieza a vivir en el cuerpo de ella y viceversa. En 2007 él mismo firmó un remake titulado Tenkôsei: Sayonara anata. En los 80 y 90 se prodiga bastante como realizador, con títulos como Shimaizaka, Sabishinbô y Shinjuro, conocidos sobre todo en Japón.