Me entero de que Harrison Ford está harto de que sus fans le pregunten una cuestión un tanto infantiloide.
Como cuando en parvulitos les decíamos a los compañeros que nuestro padre policía aporrearía al de Pepito, que era bombero, existen infraseres que le consultan a Harrison Ford quién resultaría victorioso en un combate, si Han Solo o Indiana Jones. Si fueran niños de cinco años la cosa tendría su gracia, pero no, le consultan tan interesante cuestión frikis talluditos y barbudos que superan los 40. El actor está hasta las narices, tal y como cuenta en una entrevista publicada por Esquire magazine, por el inminente estreno de Indiana Jones y el Dial del Destino.
"Ganaría yo, idiota", suele responder Harrison Ford. "¿Por qué me preguntas esa mierda?".
Pero imaginemos cómo sería una pelea entre Han Solo o Indiana Jones:
¡En un rincón del ring, con su icónico sombrero y látigo, el aventurero arqueólogo, el buscador de tesoros, el experto en reliquias... Indiana Jones! Y en el otro rincón, con su chaleco de contrabandista, su carismática sonrisa y su bláster a la cadera... el piloto espacial, el héroe rebelde, el capitán del Halcón Milenario... ¡Han Solo!
¿Quién saldrá victorioso de este épico enfrentamiento? Preparémonos para descubrirlo, pero antes de hacerlo, vamos a analizar sus fortalezas y debilidades.
Por un lado, tenemos a Indiana Jones, un hombre con una amplia experiencia en aventuras peligrosas. Es un maestro del combate cuerpo a cuerpo, capaz de enfrentarse a una horda de nazis con solo su ingenio y un látigo. Su inteligencia, conocimientos históricos y habilidades físicas son legendarios. Sin embargo, debe enfrentarse a su archienemigo: las serpientes. ¿Podría eso convertirse en su punto débil en esta batalla?
Por otro lado, está Han Solo, un piloto espacial habilidoso y un tirador experto. Su nave, el Halcón Milenario, es una maravilla tecnológica y él sabe cómo sacarle el máximo provecho. Su astucia y capacidad para salir de situaciones difíciles son inigualables. Sin embargo, ¿podría su arrogancia y su tendencia a meterse en problemas causarle algún inconveniente en esta pelea?
Y ahora, el momento que todos hemos estado esperando... ¡el enfrentamiento comienza!
El escenario está preparado. Indiana Jones desenrolla su látigo y Han Solo ajusta su bláster. Ambos se miran con determinación. Pero, espera un momento... ¡Indiana Jones saca una pistola! Han Solo sonríe y rápidamente se pone a cubierto detrás de una mesa del bar más cercano. Parece que el látigo no será suficiente contra un buen bláster.
Han Solo regresa disparando desde su escondite, pero Indiana Jones esquiva los disparos y responde con una ráfaga de balas. Los tiros pasan cerca de Han Solo, quien hábilmente usa su experiencia en combate para moverse entre las mesas y evitar los proyectiles.
La batalla se intensifica cuando Han Solo decide utilizar su gran aliado: el Halcón Milenario. Corre hacia el puerto espacial mientras Indiana Jones lo persigue. Justo cuando Han Solo se prepara para despegar, Indiana Jones salta al Halcón Milenario y se aferra desesperadamente a la nave. ¡El aventurero arqueólogo está volando por el espacio!
Pero no pasa mucho tiempo antes de que Indiana Jones, no acostumbrado a las alturas y la falta de gravedad, se suelte y sea lanzado al espacio. Han Solo, con una sonrisa burlona, le hace un gesto de despedida mientras desaparece en el hiperespacio.
Y así, queridos lectores, tenemos un ganador. Han
