Ben Demaree

La hermana gemela de Kate es asesinada. Un año después, Kate trabaja en una escuela de baile junto con el coreógrafo Miguel. Pero cuando otra compañera bailarina es asesinada, el caso recuerda demasiado a la hermana de Kate. Alguien puede estar acechándola. Thriller estadounidense con muy poco recorrido y escaso interés también por la anodina y poco imaginativa puesta en escena.

La vida perfecta de Karen, con su marido, su encantadora hijita y su trabajo magnífico, se viene abajo cuando su esposo David tiene un accidente de avión. Thriller televisivo norteamericano en donde el mayor atractivo es la presencia de Mary Badham, la inolvidable Scout, la adorable hija de Atticus Finch en Matar a un ruiseñor.

Stephanie, una madre soltera, contrae matrimonio con Jameson, viudo y padre de un hijo, Shane. Pocos días después de la boda recibe una amenaza anónima que la advierte que, en caso de no divorciarse, secuestrarán a su hija de diez años. Para colmo de males, Henry, su antigua pareja, y padre de la criatura, reaparece para pedirle que se case con él. Típico telefilm producido por la cadena americana LifeTime. Se trata de un thriller repetitivo, pero bien resuelto con actores que más o menos dan la talla. Además, alguno de los giros del argumento resulta sorprendente.

Cuando Brooke y su novio Lance tienen un accidente, él tendrá que ser atendido en un hospital, en donde estará al cuidado de una singular y atractiva enfermera. Poco tiempo después, cuando ya están en casa, sentirán que alguien les quiere matar. Producto televisivo de bajo presupuesto que se dearrolla por caminos trillados y no cuenta con un reparto muy memorable. Puede entretener si no se es exigente.

Como reza el título, internet puede convertirse en un peligroso enemigo. Es lo que le pasa a Anna, quien a través de una página de contactos empieza a quedar con varios chicos. No pasará mucho tiempo hasta que empiece a sentirse acosada. Se trata de un rutinario thriller cuyo guión apenas puede esconder la falta de originalidad. Al menos los intépretes, bastante desconocidos, se esfuerzan por hacer creíbles sus personajes.

Una joven adolescente desaparece. El principal sospechoso del hecho es el hermano de Jamie, la mujer para quien la desaparecida trabajaba de niñera. Jamie intentará descubrir la verdad de lo sucedido. Argumento ligero y trama criminal correcta dan por resultado un thriller sin demasiados vuelos, pero que resulta más o menos llevadero.

A Pauline las cosas le van bien, es una mujer de negocios y el éxito la acompaña. Sin embargo, algo viene a ensombrecer su estabilidad cuando empieza a perder cosas, olvida a su marido, se desorienta. Pauline teme que haya heredado la enfermedad de Alzheimer que acabó con su madre. Pero entonces empezará a darse cuenta de que su esposo y su secretario han conspirado contra ella y desean hacerse con el control de su empresa. Apañado thriller canadiense que cuenta con un guión entretenido, aunque la historia de fondo no dé para muchas peripecias. Los actores se esfuerzan (con la rubia Alicia Leigh Willis a la cabeza) y está dirigida con oficio por el especialista en la pequeña pantalla Sheldon Larry.

Cuando una nueva oleada de sharknados amenaza la costa de Florida, Fin se verá obligado a arriesgar su vida de nuevo para salvar la de su hija en plenas vacaciones, ya que los tiburones podrían unirse y formar un megasharknado. Tercera entrega de la saga, que mantiene parte de la frescura y las risas. Sin miedo al ridículo, acumula diálogos imposibles, y situaciones divertidas. Quizás acaba siendo un poco más simplona que sus predecesoras.

Una serie de gigantescos tornados en el mar producen el misterioso fenómeno de engullir hasta el cielo a miles de tiburones. Cuando la tormenta llegue hasta las costas de Los Ángeles y el mar inunde la ciudad, los tiburones empezarán a aparecer en medio de las calles. Fin, que ha perdido su bar al borde de la playa, huye del desastre junto a unos amigos e irá en busca de su ex mujer y de sus hijos, que pueden estar en peligro. Telefilm de acción, de bajo presupuesto, dirigido por Anthony C. Ferrante (Habitación 333) y estrenado en la cadena Syfy con gran éxito de público. El guión es tremendamente tópico, con situaciones y diálogos ridículos, al margen de que los mismos hechos son absolutamente increíbles, casi irrisorios, con variadísimas escenas tremendamente fantasiosas –el helicóptero, el desenlace con la sierra mecánica, etc., etc.– y unos efectos especiales tan baratos que cantan de lo lindo. El enorme ritmo y el trabajo del reparto quizá sea lo mejor, unido a algunos golpes de humor negro, que se ríen de la gran industria de Hollywood y que tienen su gracia, como el lúgubre destino del tipo que quiere ser actor o la huella que deja un tiburón en el paseo de la fama, frente al Teatro Chino de Grauman.

Una serie de erupciones volcánicas en Europa provocan una enorme nube de cenizas que oscurece el sol. Las temperaturas se desploman terroríficamente. Un matrimonio hará lo posible para encontrar a sus hijos, que se encuentran en París, ciudad que está a punto de congelarse. Film catastrofista que al menos pone el énfasis en el aspecto humano. Cuenta con intépretes eficaces pero el guión es tan pobre como los efectos especiales.