Piedra noche

Una película sencilla, lírica, críptica, elíptica, sobre las heridas que no se cierran pero que pueden curarse de modo inesperado. Seguimos a un matrimonio, con un niño al que le encantan los videojuegos y que ha diseñado el personaje de uno, que viven en una casa en línea de playa. Algo ocurre, y tiempo después seguimos al matrimonio, al que visita una amiga de la mujer, están cerrando la venta de la casa.

El argentino Iván Fund dirige y hace suyo un guión escrito originalmente por Santiago Loza, esforzándose en atrapar con realismo mágico el sentimiento de pérdida, que resulta no ser completa, lo que puede conceder un respiro, espacio para el consuelo.

Quizá el metraje es excesivo, y la idea podría haberse plasmado mejor en un corto, pero al menos se agradece el esfuerzo por transitar por caminos de riesgo. Sin duda que la planificación está cuidada, y la banda sonora acompaña bien en bastantes momentos. Los actores apenas tienen diálogos, se procura transmitir más por lo que no se dice que por lo que se dice.