Plumas (2021), de Omar El Zohairy

Singular película del egipcio Omar El Zohairy, que se alzó con el premio a la mejor película de la Semana de la Crítica del Festival de Cannes. Se adscribe de algún modo al realismo mágico, se trata de una especie de cuento o sencilla fábula sobre las relaciones humanas, que pueden cambiar cuando vienen mal dadas. Entre sus influencias, el director cita a Jacques Tati, Aki Kaurismäki, e incluso Robert Bresson.

Todo arranca de un modo costumbrista, seguimos a una familia más o menos acomodada, aunque debe esforzarse para llegar a final de mes, el casero no se olvida de pedirles regularmente que paguen el alquiler de su casa. Es el cumpleaños de uno de los niños, y hay una gran fiesta en casa, con amigos y vecinos, e incluso el jefe del progenitor acude a la celebración. Unos magos realizan un truco, el padre se introduce en un gran baúl. Tras la parafernalia de rigor, tachán, ¡se ha convertido en una gallina! El problema viene cuando hay que revertir el truco, porque el padre no vuelve, se ha quedado permanentemente convertido en gallina, o eso parece.

Con este artificio, El Zohairy muestra a una mujer fuerte, la madre, que debe hacerse cargo de la familia y ganarse la vida para sacarla adelante. Porque no logra resolver la situación, y además de cuidar de la gallina, debe encontrar empleo, y experimentar cómo los que parecían muy allegados, pueden dejarte en la estacada.

Se trata de una película premiosa, con una fotografía exquisita a lo Caravaggio, con bellas imágenes servidas por Kamal Samy.