Wildflower (2022), de Matt Smukler

Bea “Bambi” Johnson es una adolescente, hija de padres discapacitados intelectualmente, que sufre un accidente de naturaleza desconocida, que le deja en coma en el hospital. Alrededor de su lecho pululan sus familiares, padres, abuelos y tíos, opinando y discutiendo sobre qué hacer. A pesar de su estado, Bambi está consciente y recuerda lo que ha sido su vida hasta ese momento, y el pasado de sus padres con su improbable historia de amor y casamiento loco en Las Vegas.

Una película basada en hechos reales, supuestamente entrañable, pero sus intenciones buenistas de comedia dramática atravesada de maravillosos sentimientos no llegan a buen puerto. Su desconocido director y coguionista, Matt Smukler, dirigió en 2020 un documental sobre el caso, y ahora ha decidido recrearlo con actores, con resultado bastante irregular. El principal problema de la narración coescrita con Jana Savage es que no se centra, el espectador no tiene claro si lo que se nos quiere contar es el desafío de Bea de haberse criado con padres tan singulares, o mostrar cómo éstos han podido sacar adelante a su hija, o al menos poner el foco en esta relación hija-padres. En cambio se nos cuentan historias adolescentes de Bambi, las chicas que se burlan de ella en el instituto, su primer amor, su etapa más o menos rebelde, cuestiones hipertrilladas y que no tienen excesivo encanto.

Que el noviete tenga un testículo en vez de dos, o que a los padres no les gusten los gays, porque así lo dice Jesús, son algunas de las “gracietas” que no tienen ninguna gracia. Es decir, unos cineastas con talento habrían tratado de insertarlas en la trama con algún sentido, o habrían prescindido de ellas al advertir que nada aportan, en cambio Smukler y Savage las sirven como relleno de un film que parecía prometedor y resulta bastante insulso. Desde luego, no cabe hablar de interpretaciones memorables, y el hecho de la madre la interprete una auténtica discapacitada, Samantha Hyde –no así el padre, al que da vida Dash Mihok– carece de relevancia. Los amantes de la serie Mad Men quizá reconozcan, o quizá no, a la niña Sally Draper en la protagonista Bambi, la actriz Kiernan Shipka, que ya cuenta 22 años.