Casi muertos (2023), de Dean Holland

Nell Serrano regresa a su ciudad después de diez años en el extranjero, a donde se marchó por amor cuando tenía por delante un futuro profesional prometedor. Ahora siente una tremenda sensación de fracaso y soledad, pero gracias a su antigua amiga Sam ha conseguido un puesto en el periódico que dejó años atrás. Sin embargo, situarse de nuevo no va a ser tan fácil. La nueva jefa –antigua conocida de Nell– es insufrible y la recién llegada empezará desde abajo, hasta el punto de que le encargan escribir los obituarios. Lo que no podía ni imagnar es que con cada encargo, el protagonista muerto se le aparecerá como un fantasma para contarle su vida...

Simpática serie estadounidense que logra gracias a su humor y su positiva ligereza mantener el interés de cada capítulo. Creada por Casey Johnson y David Windsor, la historia se basa en una novela de Alexandra Potter. Ciertamente la premisa tiene su originalidad y se le sabe sacar partido a cada uno de los “fiambres” que van apareciendo en la vida diaria de Nell. Algunos serán desconocidos y amables, otros serán conocidos o insoportables, pero gracias a ellos Nell irá aprendiendo también a recomponerse a sí misma echando la mirada al exterior, a las vidas de otras personas que también tuvieron sus esperanzas, fracasos, amores y tristezas.

Con mucho aire de sitcom, por la frecura de las situaciones y la profusión de planos interiores, Casi muertos destaca también por los personajes que pueblan la vida de Nell, como el excéntrico compañero de piso que padece Síndrome de Asperger, su íntima amiga de la oficina, Sam, y la insoportable y rubia jefa, con quien la protagonista establece una tirante relación. No funcionan tan bien algunos excesos tontorrones de buenismo, como las cursiladas perpetradas por el compañero gay (el trauma del baloncesto se lleva la palma). Por lo demás prima el buen rollo y el humor, con diálogos y réplicas magníficamente escritas, y el hecho de que cada episodio de los trece totales dure menos de media hora hace que el visionado sea agradable. Destaca sin duda la composición de las tres actrices principales: Gina Rodriguez (Nell), Hannah Simone (Sam) y Lauren Ash (Lexi).