Los hombres del S.A.S. (2022), de Tom Shankland

Segunda Guerra Mundial. El general alemán Rommel avanza con sus tropas hacia El Cairo sin que el ejército aliado pueda remediarlo. Harto de la desidia de sus superiores, el teniente británico David Stirling convence a dos compañeros, el loco Paddy Mayne y el supuestamente sensato Rex Whisler, para una misión aparentemente suicida, pero que podría cambiar el curso de la guerra en el Norte de África: infiltrarse en la retaguardia para hacer escaramuzas contra el enemigo.

Steven Knight, creador de Peaky Blinders, está detrás de esta sorprendente y fresca propuesta. Adapta el libro homónimo del reconocido historiador Ben Macintyre, que cuenta la creación del Special Air Service (SAS), unidad de élite pionera del Reino Unido, nacida en 1941. El argumento sigue al pie de la letra los hechos reales, pese a que pudiera parecer lo contrario, sobre todo porque los personajes parecen propios de un cómic, el tono imita al de Malditos bastardos, de Quentin Tarantino, la música de rock duro anacrónica le quita realismo, y algunas secuencias, pese a haber ocurrido en realidad, resultan complicadas de creer (véase el vistoso ataque en jeeps a un aeródromo alemán).

No se sabe quien está mejor de los tres protagonistas, si Connor Swindells (Stirling), Alfie Allen (Lewes) o Jack Connell (Mayne). Pese a tratarse de una historia bastante masculina, porque así lo fue en realidad, se come la pantalla cada vez que aparece la actriz y modelo argelina Sofia Boutella, que da vida a Eve, representante de los servicios secretos de la Francia Libre de De Gaulle en el Cairo. Se suponía que iba a ser una miniserie de seis capítulos, pero ha tenido éxito, por lo que se habla de que tendrá segunda temporada, lo que no resulta descabellado pues quedan cosas por contar.