Lightyear (2022)

Buzz Lightyear forma parte del equipo de guardianes de la galaxia que protege a los humanos que viajan en busca de nuevos mundos en una gigantesca astronave. Pero ésta se estrella en un planeta lleno de criaturas hostiles, con tan mala suerte que el cristal que sirve como fuente de energía queda destruido, por lo que se impone construir otro, lo que lleva bastante tiempo. Cuando se concluye el primer prototipo, Lightyear lo prueba en un vuelo con un caza espacial, pero el invento no está perfeccionado, por lo que no logra la hipervelocidad deseada. Además, aunque él solo ha invertido unos minutos en el vuelo, para el resto de compañeros han transcurrido cuatro años…

Peculiar regreso al universo de Toy Story. Según los rótulos iniciales, en 1995 a Andy le regalaron por su cumpleaños un juguete de Buzz Lightyear, basado en su película favorita. “Ésta sería aquella película”, explica el texto. Aunque resulta extraño que un chaval que tiene en el film unos 7 años entendiera una película que pese a estar rodada mediante animación digital sigue el sendero de películas de ciencia ficción duras, con conceptos quizás complejos de entender a esa edad, como la dilatación del tiempo, que viene de la Teoría de la Relatividad de Einstein.

Está al frente Angus MacLane, que ya ejerció como co-director de Buscando a Dory. Como en aquélla, en el guión –coescrito por él mismo a partir del personaje creado por John Lasseter– falta alguno de esos elementos realmente novedosos de las mejores películas de Pixar. Falla también el ritmo, sobre todo en el tramo de los intentos concatenados del protagonista por lograr la rapidez necesaria para volver a la Tierra. Los guiños de Disney al público LGTBI han ido en aumento, pues aquí se hacen muchas referencias a Alisha Hawthorne, la compañera gay de Lightyear.

Se compensa esa falta de originalidad por la animación cuidada, como es habitual en la compañía, y por sus guiños a Alien, el octavo pasajero, La guerra de las galaxias, y a otras producciones de ciencia ficción, que apreciará sobre todo el público adulto. Además, tiene alguna secuencia dramática típica de la casa que funciona, en especial la despedida en un mensaje holográfico de Hawthorne, acompañada de su nieta, Izzy, uno de los personajes principales. En el film destaca sobre todo Sox, el “robot acompañante personal” de Buzz, con forma de gato.