George Hilton

Año 1506. Felipe II de España envía a Roma al Duque de Riveira y Fuentes para que haga llegar al Papa deseos de amistad. Por el camino será interceptado por unos bandoleros liderados por Duccio, quien adoptará la identidad del Duque y se introducirá entre los nobles de Roma, donde entablará relación principalmente con Lucrecia Borgia. Comedia erótica hispanoitaliana, ambientada en el mundo picaresco de la corte, que aprovecha la fama libertina de Lucrecia Borgia para ofrecer continuas y explícitas escenas de sexo, salpicadas de golpes de humor. Protagoniza George Hilton (Todos los colores de la oscuridad), mientras que la desinhibida Lucrecia está interpretada por Sirpa Lane, actriz finlandesa que murió de SIDA con tan sólo 47 años.

En una sala judicial salen a relucir tres provocativas y verdulescas historias: un tipo choca con unos nudistas en una playa; una guapa alemana engatusa a un romántico italiano; un joven que intenta vender un yate a un emir vivirá ciertas experiencias eróticas. Desvergonzada comedia italiana llena de gags tontorrones y explícitamente pícaros que repite el mismo esquema de Sábado, domingo y viernes y Azúcar y miel, con tres historias sexuales diferentes, con idéntico equipo técnico y parte del mismo equipo artístico, con actores de películas italianas de la época con mucha carne que enseñar, tales como Edwige Fenech, Lino Banfi o Pippo Franco.

Un matrimonio con desaveniencias. El marido engaña a su mujer y ésta quiere el divorcio. Al no conseguirlo, la esposa contrata a un detective para que encuentre pruebas de las infidelidades del marido. Habrá un asesinato de por medio. Curioso thriller con acendrada atmósfera erótica, y una intriga cercana al cine "giagllo" italiano.

Marcella es una guapa taxista de Roma. Por diversos motivos tendrá que ver varias veces al comisario de policía. A la vez, debido a su atractivo físico, tiene que espantar continuamente a los hombres, especialmente a Ramón, un calzonazos al que su esposa persigue; a Walter, un tonto agente de policía; y a Adone Adonis, un mafiosos de poca monta. Comedia ridícula italiana, apoyada en el gancho de Edwige Fenech y en un burdo guión repletito de gags absolutamente idiotas, con personajes totalmente mastuerzos que han quedado muy desfasados. Destaca en este sentido la "acelerada" persecución final, una larga y delirante secuencia que emparenta con las películas de cine mudo.

El Zorro, heroico enmascarado, resulta gravemente herido trasenfrentarse a los soldados del Rey. Su amigo y aliado el padre Donato decide sustituirle por Felipe, un joven pícaro perseguido, al que debe iniciar en el arte de la espada. Coproducción hispano-italiana que retoma las aventuras del famoso personaje, con alguna idea que funciona, pero en general una abrumadora falta de calidad.

Spaghetti-western protagonizado por el especialista en el género George Hilton y dirigida competentemente por el italiano Giuliano Carnimeo (Las lágrimas de Jennifer). La historia versa alrededor de un botín que todos quieren y que está escondido en un psiquiátrico.

Un pistolero llamado Trasette y el sheriff Bambi son contratados por un banquero para llevar un cargamento de oro a Dallas. A pesar de ir de incógnito como comerciantes tendrán que enfrentarse a multitud de peligros. Spaghetti western en clave de comedia que cumple con las constantes de género y que no aburrirá a los incondicionales. Tiene a su favor la presencia de George Hilton como protagonista.

Jane es una joven que sufre unas extrañísimas pesadillas, llenas de violencia y sangre. Su marido está muy preocupado y ella acude a un psicoanalista, que relaciona ese hecho con el asesinato de su madre cuando la joven era muy pequeña. Lo malo es que el hombre que se le aparece en sueños empieza a hacerse real, de modo que ella ya no sabe si está loca o su vida corre peligro. Inquietante película del italiano Sergio Martino (Assassinio al cimitero etrusco), coproducida por España e Italia, que tiene como reclamo a la atractiva Edwige Fenech, famosa por enseñar su cuerpo más de lo normal. La trama es muy de su época, de modo que hay muchas vueltas y revueltas, momentos de tensión, imágenes surrealistas y personajes ambiguos. También se recrea en el mundo de las sectas, con ritos morbosos, y en la moda del psicoanálisis.

Andrea, un propietario de apartamentos, busca inquilinos. En esa labor le ayuda un amigo fotógrafo, preséntandole a sus modelos. Sin embargo, en el edificio de apartamentos se producirán algunos asesinatos de jovencitas, y una de ellas será una modelo recién instalada en uno de los pisos de Andrea. El apartamento será de nuevo habitado por otras dos modelos, Jennifer y Marilyn. Andrea y Jennifer se enamoran, pero parece que la amenaza de más asesinatos sigue en el aire. La policía tiene sus sospechas, pero todo es muy misterioso. Thriller italiano setentero, que juega bien las bazas de la intriga y de la ambigüedad de los personajes, con los que se juega con su culpabilidad o inocencia. También, como es propio de esa época en Italia, se carga la mano en el erotismo. Protagonizan con eficacia George Hilton y Edwige Fenech, que ya coincidieron en películas similares como Todos los colores de la oscuridad.

Miguel Azzini es un prestigioso cirujano que negocia con otra clínica diferente a la que trabaja un posible contrato. Esto no gusta a la dirección. Al poco tiempo el cirujano es asesinado.

En Roma, el forajido Stefano Pelloni, conocido como El Passatore, se enfrenta con el jefe de policía. Aburrida cinta de policías y ladrones con muy poco tirón, muy similar a otras producciones italo-españolas de la época.

Peretti es un detective que investiga el extraño caso de un hombre que ha sido decapitado con una excavadora, a la orilla de una pequeña laguna. El fallecido es un tal Paradisi, detective privado, y el inspector Peretti sospecha que su muerte tiene que ver con otro trágico suceso, el caso Moroni, en el que asesinaron a una niña. Coproducción italoespañola que responde una trama policial absolutamente lineal. Peretti irá hilando hechos para intentar descubrir al culpable, mientras que éste –usando el clásico recurso de la cámara subjetiva, tan de la época– va a su vez asesinando a quienes puedan saber algo de él. El desenlace tiene lugar en un salón, con todos los sospechosos, al estilo de Agatha Christie. Aunque entretiene, la película se hace larga y un poco monótona.

Thriller con notas terror, al más puro estilo italiano de los 70. El marido de Lisa Baumer muere en un accidente aéreo, y ella pasa a ser sospechosa de su muerte debido a que una semana antes el fallecido firmó un seguro de vida de 100.000 dólares. Sin embargo, las investigaciones de la policía, de la interpol y de un investigador de seguros se complican cuando empiezan a morir personas relacionadas con el caso, entre ellas Lisa. El film está muy bien estructurado y quizá lo mejor sea el guión logrado, con quiebros y requiebros, y el efectista desenlace final. Los actores hacen un trabajo estimable.

La señora Ward, esposa de un embajador, lleva una vida amorosa complicada. Aparte de la relación con su marido, su ex amante la sigue acosando con tentaciones sadomasoquistas, y también conocerá a un apuesto heredero australiano. Pero la vida de la señora Ward se verá sometida a una gran tensión cuando un sanguinario asesino en serie la elige como siguiente víctima. El director Sergio Martino entrega una película muy de la época, en cuanto a atmósfera criminal de intriga y contenido erótico de múltiples escenas, en la línea de Todos los colores de la oscuridad o Vicios prohibidos, también protagonizadas por la actriz francesa Edwige Fenech. Aquí se suma un guión manipulado hasta la saciedad para mantener la intriga, aunque para eso haya que sacarse de la chistera soluciones absolutamente rocambolescas e inverosímiles.

Un agente secreto debe recuperar unos documentos y para ello debe ir a Hong Kong. Le ayudará un agente que trabaja en la delegación italiana.

El ejército mexicano posee un importante botín en joyas con el que pretende comprar armas a Estados Unidos. Aleluya, un mercenario estadounidense, es contratado por el revolucionario general Ramírez para robar ese tesoro y así impedir el rearme. Spaghetti western del sólido director Giuliano Carnimeo, que aquí sin embargo no acaba de dar con la tecla justa en una no del todo lograda mezcla entre la acción y el humor. Además, el guión resulta demasiado enrevesado y absurdo, con la inclusión de estrafalarios personajes.

Diciembre de 1944. Meses después del Desembarco de Normandía, los soldados americanos piensan que los alemanes están a punto de ser derrotados. Sin embargo, sus actividades se recrudecen. Film bélico franco-italiano de bajo presupuesto y argumento lleno de tópicos. A pesar de todo, los actores se esfuerzan y la cinta tiene parte del encanto del cine de serie B.

Durante la Guerra de Secesión norteamericana, John (George Hilton), un valiente soldado, decide desertar al saber que su amada está embarazada. Cuando llega a la hacienda donde vive se entera de que ella ha muerto por el cólera, mientras que Sandoval (Ernest Borgnine), el padre de ella, que odia a John, le da al hijo que ella ha parido. Sin embargo, éste acabará muriendo de hambre... John se convertirá en forajido y el odio entre ambos hombres irá incrementándose. Logrado spaghetti-western dirigido por Julio Buchs con bastante intensidad y rodado en Lucainena de las Torres, localidad española de la provincia de Almería. Sorprende el atinado reparto internacional, con presencia de nombres tan conocidos como Ernest Borgnine. Se trata de un típico producto de este género, con bastantes enfrentamientos violentos y final sangriento al estilo tragedia clásica.

Becker encarga a David, un pistolero, que transporte una importante carga de oro a través de un territorio dominado por el bandido El Renegado. Típico spaghetti-western, con argumento un tanto gastado.

Lord y Bull son dos aventureros con una gran habilidad con las armas, que son contratados por un juez para una misteriosa misión. Cuando llegan al pueblo donde conocerán los detalles del encargo, no encuentran al juez y descubren que los habitantes los prefieren muertos... Loable spaghetti Western dirigido con mano fime por Giuliano Carnimeo y con un gran especialista al frente del reparto, George Hilton.

Cuando un hombre llamado Steve es asesinado por una disputa de tierras, su amigo Johnny King decide vengarle e ir en busca de los responsables, los hermanos Ward. Sin embargo, los problemas llegarán para él por otro lado. Spaghetti western que cuenta como mayor aliciente con la presencia del eficaz George Hilton (Todos los colores de la oscuridad) en el papel protagonista. Para aficionados al género.

Teddy es un aventurero que es solicitado para ayudar a los rebeldes de la república de Ghentar con el fin de acabar con un cruel dictador llamado Lorme. Para ello deberá realizar una peligrosa misión: recuperar unos documentos desaparecidos en el fondo del mar tras la caída del avión en donde se encontraban. Discreta aunque entretenidilla muestra de cine de aventuras, coproducida por España e Italia, y que cuenta con la siempre eficaz presencia de George Hilton (Las lágrimas de Jennifer). Dirige León Klimovsky, célebre por sus películas de terror de serie B.

Una banda de ladrones atraca un banco y se lleva 500.00 dólares con la ayuda de un monje. Después del robo la banda de Jarret espera la llegada de un nativo que les guíe por el desierto mexicano. Entretenido spaghetti-western que explota con esmero las constantes del género, sobre todo la violencia. Protagoniza George Hilton (Todos los colores de la oscuridad).

Varios soldados son detenidos y condenados a muerte. Pero el general de su batallón les perdonará la vida si recuperan un carro lleno de oro. Film hispanoitaliano de planteamientos similares a la superior 12 del patíbulo, producida curiosamente el mismo año, un tipo de historia que se pondría de moda desde entonces. Aquí el ritmo está logrado y contiene la violencia esperada, con un punto de humor. Ayuda al visionado la presencia de un George Hilton siempre eficaz, y destaca la presencia de los españoles Mónica Randall y José Bódalo.

Kitosch trabaja como peón en una hacienda. Cuando es descubierto por su patrón seduciendo a su esposa, Kitosh recibirá severas palizas. Spaghetti western con protagonismo para George Hilton, a quien le van al pelo los papeles de mujeriego caradura. El mismo año, el actor volvió a trabajar con el realizar Nando Cicero en Los profesionales de la muerte. Otros incondicionales del género le acompañan en esta ocasión, como el español Eduardo Fajardo. Se deja ver.

Un buscador de oro, Tom, recibe una carta de un amigo de su pueblo natal en donde le pide que regrese lo antes posible. Cuando Tom llega al pueblo lo encuentra sometido a la voluntad de un insensible hacendado y su sádico hijo. Todos aquellos que van en su contra, incluyendo el amigo que envió la carta, son asesinados. Eestern dirigidio por el italiano Lucio Fulci, antes de que fuera por otros derroteros cinematográficos más terroríficos y sanguinolentos. Como es de suponer ofrece aquí las dosis de acción y violencia características del género y la época. Y cuenta en su favor un reparto a la altura.

Comedia hispanoitaliana cuyo título juega a parodiar las historias de 007. La historia cuenta como dos crápulas caraduras se ven envueltos sin querer en una peligrosa trama de espionaje. Todo parece estar controlado por el malvado Goldginger, personaje interpretado por el español Fernando Rey.