¿Puede el cine atrapar la realidad? ¿Y si lo que se cuenta pasó ayer, y muchos de sus protagonistas viven y sufren todavía?
Al cine le gusta mirar con frecuencia a la realidad, son frecuentes los letreros, al principio o al final de una película, donde se lee “Basada en hechos reales”. En otras ocasiones, cubriéndose las espaldas por las llamadas licencias artísticas, lo que se pone es “Inspirada en hechos reales”, lo que justifica que se dé más rienda suelta a la imaginación o a los cambios, para dar mayor emoción a la cosa.