Sneaky Pete (2017), de Laura Innes

Original serie gangsteril, de pillos criminales expertos en el fingimiento. Sigue a Marius, timador y ladrón recién salido de la cárcel en libertad condicional, que para evitar represalias del gángster ex policía y dueño de una sala de juego Vince, a quien trató de jugársela, se apropia de la identidad de quien fue su locuaz compañero de celda, que no dejaba de hablar de una familia a la que no ve desde hace veinte años, y que ignoran que ha estado entre rejas. Así que se presenta como el primo y nieto Pete, ignorante de que la abuela Audrey, auténtica matriarca de la familia, lidera operaciones de dudosa legalidad, hasta el punto de podría haber pasado de “guatemala” a “guatepeor”. De momento toca seguir la corriente, y guiarse por lo que escuchó al auténtico Pete, demostrando ser un talento natural para decir a los demás lo que quieren oír. Además, mientras elude a Vince y trata de que su hermano y cómplice Eddie no le meta en líos, va aprendiendo el oficio de bonos de fianzas de presuntos criminales, mientras piensa cómo robarles su capital. Al mismo tiempo el agente de la condicional está algo “mosca”, y tratará de demostrar que ha violado sus términos para volver a encerrarle, por algo le llaman mister Éxito.

Bryan Cranston seguramente ha tenido una espléndida escuela para lanzarse a crear esta serie en Breaking Bad, de cuyas coordenadas no anda demasiado alejado, y además se ha asociado a uno de los grandes en este formato, David Shore, responsable de éxitos como Ley y orden, House y The Good Doctor. Ambos han creado una trama criminal con elementos típicos de las historias de timos y simulaciones, incluso se cita al clásico cinematográfico por antonomasia El golpe, pero con personalidad propia y capacidad de sorprender. Y aunque a ratos puede ser difícil de seguir, por los rápidos diálogos y los elementos, a veces técnicos, de las situaciones y artimañas que afrontan los personajes, lo cierto es que engancha y supone un verdadero deleite su visionado.

El reparto es excelente, muy bien seleccionado, y está encabezado por Giovanni Ribisi, que sabe dotar a su personaje de la cintura que se le supone, para eso es “sneaky”, “escurridizo”, y debe improvisar su discurso sobre la marcha todo el rato. Pero todos los miembros de “su familia” están fantásticos, desde la jefa a la que da vida Margo Martindale, a su marido interpretado por Peter Gerety, pasando por la prima con dos hijos de diferente padre de Marin Ireland, y la adolescente inquietante de Libe Barer. Y eso por no insistir en propio Cranston que se reserva el papel de Vince, más secundario, o al “hermanito”, típico perdedor metepatas encarnado por Michael Drayer.