
Christian Petzold
62 añosPremios: 1 Festival de Berlín Ver más
El cineasta del sufrimiento
Christian Petzold (Hilden, Alemania, 1960) llegó al cine a partir de la escritura. Estudiante de Literatura y Teatro en la Universidad de Berlín, entendió que las películas podían alcanzar el rango de arte mayor gracias a Hitchcock y a Truffaut, de los que heredó su profunda sensibilidad por el celuloide.
Este cineasta alemán, de gran formación cultural, debutó en la gran pantalla con Die Innere Sicherheit en el 2000: la historia de una pareja de terroristas de izquierdas que lleva escapando de la policía más de quince años y que tiene una hija adolescente. En esta obra Petzold demostró que su cine esboza más dudas que respuestas, que le encanta replantearse la historia y que la composición de sus planos comunica casi tanto como los diálogos que él mismo escribe. Además, esta película fue la primera de una trilogía, completada por Gespenster (2005) y Yella (2007), en la que este director trata el tema del desplazamiento.
Después llegó Jerichow (2008), un drama romántico inusual que exploraba los problemas de un triángulo amoroso y que, por controvertido, dividió a la crítica. Tras esta película, Petzold empezó su saga histórica con Barbara (2012). Ambientada en la Europa de finales de los 70, la película narra la historia de Barbara, una doctora que es relegada a un hospital cerca del Báltico tras haber intentado escaparse de la Alemania comunista. Como no podía ser de otra forma tratándose de este director, la cinta le debe mucho a la literatura, concretamente a dos novelas: “Barbara” de Herman Broch y a “Rummerplatz”, de Wener Braunig. Fue considerada digna heredera de La vida de los otros y recibió el Oso de Plata en el Berlinale de 2012; galardones merecidos para una obra que logró retratar el espíritu de un país que, aun sabiendo que iba a desaparecer, luchó por su futuro contra toda lógica.
En su siguiente película, Phoenix (2014), Petzold retrocedió más atrás en el tiempo y contó una historia ambientada en el nazismo. Sin embargo, y como es habitual en este cineasta, la cinta se alejó de todos los clichés para contar la vida de una cantante tras su calvario en un campo de concentración. Esta obra indaga en las consecuencias de la barbarie pero desde una perspectiva nueva; se centra en las cicatrices que se niegan a desaparecer, que han enraizado en las carnes de la persona.
En definitiva, el cine de Petzold se centra en el drama, todo se pliega a él. Sus películas indagan en el sufrimiento humano de forma sincera, a través de un lenguaje pausado y estático tras el que se esconden una serie de tensiones subterráneas que son el verdadero motor de su obra.
Premios
Ganador de 1 premio
- Oso de Plata al Mejor Director Barbara