Biografía de Lindsay Lohan (1986)

Nacida el 2 de julio de 1986, la neoyorquina Lindsay Lohan es la mayor de los cuatro hijos de Michael Lohan, operador de Wall Street de clase alta, y de Dina, bailarina y ex cantante. La infancia de Lindsay no fue fácil, pues sus padres se separaron cuando ella tenía tres años, posteriormente volvieron a reunirse, y al final se divorciaron. "Me ponían entre ellos para tratar de mantener la paz", ha declarado la actriz, que sobre todo ha tenido problemas de relación con su progenitor.

A pesar de los conflictos paternos, sus padres siempre estuvieron de acuerdo en intentar que sus hijos triunfaran desde muy pequeños en el mundo de la imagen. Así, han tratado que todos se convirtieran en modelos e intérpretes. En el caso de Lindsay, a los 3 años ya posaba para fotografías de catálogos de marcas de ropa infantil. También se prodigó en el campo de los anuncios publicitarios pues llegó a intervenir en un centenar de spots.

Debutó como actriz en televisión, con varios episodios de Another World. Pero su gran oportunidad le llegó cuando fue fichada por la productora Walt Disney para protagonizar Tú a Londres y yo a California, remake del clásico de la casa conocido en España como Tú a Boston y yo a California. Lohan heredó el doble papel de la célebre Hayley Mills, dando vida a dos gemelas que ignoraban su mutua existencia y que conspiran para reunir a sus padres divorciados.

"Dejé la escuela durante ocho meses. Cuando volví, mis amigos me preguntaban que dónde había estado, y yo respondía: ‘mi familia y yo tuvimos unas largas vacaciones’. Después se estrenó la película, y ellos decían: ‘Lindsay... ¡eres tú la de Tú a Londres y yo a California!’ Y yo respondía: ‘Ah, sí. Y también rodé esa película mientras estaba fuera’."

Por aquel entonces la estrella emergente derrochaba frescura y simpatía. El éxito del film convirtió a Lohan en una celebridad, así que Disney aprovechó su tirón para emparejarla con la veterana Jamie Lee Curtis en Ponte en mi lugar, otra nueva versión de una comedia familiar de la factoría, en este caso de Viernes loco. Esta vez, Lohan retomó un papel que en su día interpretó una jovencísima Jodie Foster, una hija que intercambia por un día su personalidad con su madre.

Por aquel entonces, Lohan iniciaba su carrera como cantante para seguir la estela de Marilyn Monroe, con la que está obsesionada tras descubrir Niágara. Cantaba un tema musical en la citada Ponte en mi lugar, y en 2004 lanzó su primer disco, "Speak", que tuvo cierta repercusión en las listas de éxitos.

Su primer largo de cine que no versionaba un título anterior fue Quiero ser superfamosa, donde encarnaba a una adolescente que intenta adaptarse a su nuevo hogar tras una mudanza. Pero no estaba a la altura de sus anteriores estrenos y tuvo menos éxito. Interpretó a una estudiante de instituto enfrentada a la chica más popular en Chicas malas, su primera cinta fuera de la factoría Disney, escrita por Tina Fey.

Volvió a la factoría del ratón para protagonizar otra actualización de un título de la productora, Herbie: a tope, basada en Ahí va ese bólido. Interpretaba a una chica que se lleva de un desguace un Volkswagen escarabajo con nombre, Herbie, y personalidad propia.

Sin embargo, la desorientada estrella empezó a acaparar titulares por su afición a los excesos fiesteros. Tras unas fotos subidas de tono con la modelo Kate Moss, tras una noche de loca en Nueva York en 2006, Lohan se convierte en la favorita de los paparazzi junto con Britney Spears y Paris Hilton, que tampoco paraban en casa. Muchas publicaciones aireaban los problemas de Lohan con el alcohol y las drogas, y tras ser arrestada por conducir en estado de embriaguez tras un accidente, ingresa en rehabilitación. Poco después la vuelven a detener por posesión de cocaína.

Fue también muy sonada su incomparecencia en un juicio, circunstancia que motivó que la juez la obligara a llevar un brazalete que comprobaba si consumía alcohol. También fue condenada a 35 días de arresto domiciliario por el supuesto robo de un collar. En el terreno sentimental se resiste a sentar la cabeza y ha tenido romances con el director Brett Ratner, los actores Jared Leto y Jude Law, los cantantes Ryan Adams y Aaron Carter, entre otros muchos.

Su decadencia afectó gravemente a su carrera cinematográfica. Tras la poco estimulante comedia para adolescentes Devuélveme mi suerte, que precisamente no tuvo fortuna ninguna en las taquillas, Lindsay Lohan se replantea su carrera, y trata de abrirse camino en el cine independiente con un breve papel en la excelente Bobby, el film de Emilio Estevez sobre el asesinato de Robert F. Kennedy, donde era una muchacha que se casaba para evitar que su novio (Elijah Wood) fuera a la guerra de Vietnam. También giraba en torno a otra ilustre figura tiroteada El asesinato de John Lennon, donde encarnaba a una admiradora del músico.

Tuvo una oportunidad de volver a la cima con la fallida Lo dice Georgia, donde tenía como compañera de reparto a la gran Jane Fonda. "Realizó un gran trabajo, siempre que consiguieron que se presentara en el set", dijo de ella Fonda. Tras el fracaso de Un trabajo embarazoso y Sé quién me mató, realiza una aparición subida de tono en Machete. También intervino en la serie Betty.

En los últimos tiempos, Lindsay Lohan intenta rehabilitarse para retomar su trabajo en el cine. Le ofrecen algún papel poco estimulante, pues por ejemplo participa en InAPPropiate Comedy, al servicio del humorista Rob Schneider. Pero también ha sido escogida para interpretar a la mítica Elizabeth Taylor en la producción televisiva Liz & Dick, sobre la relación de ésta con Richard Burton. Podría ser una oportunidad de oro para encaminarse de nuevo hacia arriba.