
Gabrielle Anwar
53 añosDulce niña
Conoció el éxito desde muy joven y durante años intentó aguantar su 'estatus' como actriz. Sin embargo, poco a poco su filmografía decayó, debido a películas no demasiado atractivas. Todo lo contrario que ella, que mantiene su dulzura de antaño.
Todo el mundo con una mínima cultura cinéfila recuerda a Gabrielle Anwar como la preciosa jovencita que encandilaba al ingenuo Chris O'Donnell y que bailaba un maravilloso tango –"Por una cabeza", para más señas– con el ciego Al Pacino en la película Esencia de mujer. Gabrielle contaba con pocos minutos en pantalla pero fueron suficientes: su bella presencia quedó para siempre en la mente de los espectadores.
Gabrielle Anwar nació en Laleham (Inglaterra) el 4 de febrero de 1970. Es hija de un montador de películas y de una actriz, por lo que su oficio le viene de familia, y ya desde joven quiso seguir ese camino estudiando en una escuela de danza e interpretación en Londres. Debutó a los 16 años en una discreta miniserie de televisión titulada Hideaway, a la que siguió un curioso film rumano, Sa-ti vorbesc despre mine. Sin embargo, su primer trabajo digno de mención llegó a sus dieciocho años con Manifesto, una comedia dramática basada en una novela de Émile Zola, y en la que participaban también Alfred Molina o Eric Stoltz. Tras ese film trabajó esporádicamente en varias series televisivas, como The Storyteller, First Born o Summer's Lease, aunque mucha más presencia tuvo en Press Gang. Debido a su trabajo televisivo conoció al actor americano Craig Sheffer, con el que se encariñó y luego siguió su impulso de marchar con él a Los Angeles en 1990. Debutó ese mismo año en el cine yanqui con la apañada comedia de acción If Looks Could Kill. Y luego llegó su protagonismo en el drama romántico Wild Hearts Can't Be Broken (1991), de Steve Miner. Este film sigue siendo considerado por Gabrille como uno de sus preferidos de entre su filmografía. Y al año siguiente fue cuando alcanzó el cenit de su popularidad, con su papelito de Donna en Esencia de mujer, donde estuvo verdaderamente genial. Imposible olvidar la dulzura de su mirada y su gesto tímido y sorprendido. Llegaron entonces los mejores momentos de su carrera, con trabajos en películas de cierto renombre, tales como la terrorífica Secuestradores de cuerpos, de Abel Ferrara, la comedia Conserje a su medida, con Michael J. Fox, o Los tres mosqueteros (1993), de Stephen Herek, donde se reencontró de nuevo con su amigo Chris O'Donnell.
A mediado de los años 90 la filmografía de la actriz se vuelve poco destacable, casi siempre con pequeños papeles en filmes a menudo discretos o poco conocidos. Trabajó con Stephen Dorff en el thriller Innocent Lies (1995), y el mismo año tuvo un importante papel en el logrado telefilm del oeste The Pursuit of Honor. Formó parte del reparto del oscuro thriller Cosas que hacer en Denver cuando estás muerto y compartió cartel con su pareja de entonces, Craig Sheffer, en The Grave. Precisamente con Sheffer tuvo una hija, Willow, en 1993, aunque posteriormente se separarían y Gabrielle contraería matrimonio con el actor John Verea, con quien tuvo otros dos hijos antes de divorciarse. En 1997 la actriz formó parte del elenco de una película coral titulada Nevada (1997), junto a compañeras como Amy Brenneman, Kirstie Alley o Saffron Burrows. En el año 2000 destacó algo más su película Presunto homicida, con Bill Pullman. Sin embargo, a partir de entonces y salvo algunas excepciones, su trabajo se ve relegado a películas de bajo presupuesto, telefilmes o producciones que sólo se estrenan en vídeo, tales como Turbulence. Secuestro en la red (2001), Try to Remember (2004) o El portal de la muerte (2006). Y entonces, cuando todo parecía perdido para ella, iban a venir tiempos mejores. En 2007 se unió al reparto de la serie de éxito Los Tudor, sobre la dinastía inglesa, donde interpreta a la princesa Margaret en seis episodios. Y se ve que le ha cogido gustillo a las series porque enseguida pasó a protagonizar la comedia criminal Último aviso, junto a Jeffrey Donovan, de la que se han emitido hasta el momento tres temporadas. Para el 2010 Gabrielle tiene previsto estrenar Corazón de guerrero, junto a la joven promesa Ashley Greene.