
Aida Folch
36 añosDe niña a mujer
Joven y guapa, Aida Folch empezó su carrera como adolescente de la mano de Fernando Trueba, y gracias a este realizador podría dar un nuevo impulso a su carrera gracias a "El artista y la modelo".
Aida Benítez Folch nació en Reus, Tarragona, España, el 24 de noviembre de 1986. Siendo niña hacía teatro como actividad extraescolar en la compañía Llops Teatre. Se apuntó en Barcelona en una agencia para ver si la llamaban para hacer anuncios publicitarios, pero la cosa no se materializó. En cambio, contando sólo 14 años, supo que se estaba haciendo un casting para El embrujo de Shanghai (2002), Fernando Trueba necesita una actriz para el papel protagonista y ella acabó siendo la seleccionada. Fue un arranque importante, más allá de que el autor de la novela en que se basaba el film, Juan Marsé, no estuviera contento de los avatares de la adaptación, que inicialmente iba a acometer Víctor Erice. Por si fuera poco, Fernando León de Aranoa contaría con ella ese mismo año para Los lunes al sol, se codeaba con unos de los grandes de la interpretación, el mismísimo Javier Bardem.
Tras arranque tan espectacular, Folch siguió estudiando, y para su formación interpretativa no dudaría en recurrir a sitios tan prestigiosos como el Centro de Nuevos Creadores de Cristina Rota y la Escuela de Interpretación de Juan Carlos Corazza. Sus nuevos filmes no serían tan llamativos como los que marcaron el inicio de su carrera, pero estuvo con un papelito e 2006 en Salvador Puig Antich y tuvo algo más de presencia en Las vidas de Celia. El thriller 25 kilates era bastante olvidable, así como el telefilm sobre malos tratos a la mujer No temas, Sara, ambos de 2009. En cambio en televisión, aparte de hacer la miniserie Inocentes, fue la hija francesa de Juan Echanove en Cuéntame como pasó a partir de la décima temporada.
El dominio del francés ha permitido que Fernando Trueba haya vuelto a acudir a ella con El artista y la modelo, película rodada íntegramente en ese idioma y en blanco y negro, donde la actriz supera el reto de posar desnuda gran parte de la cinta, ya que es la modelo de un afamado escultor, a quien da vida Jean Rochefort.