
Michel Serrault
79 años ()Monumento del cine francés
Michel Serrault, uno de los actores más populares en su país, Francia, ha fallecido el domingo, 29 de julio, a los 79 años de edad, en su residencia de Honfleur, al norte del país. Serrault padecía cáncer desde hace algún tiempo, por lo que estuvo hospitalizado, según ha explicado el padre Alain Maillard, portavoz de la familia. A finales de junio, salió para descansar en su residencia habitual, donde le sobrevino la muerte. Deja tras de sí una extensa carrera cinematográfica que comprende 135 películas, en las que demostró su valía en papeles muy diferentes, tanto cómicos como dramáticos.
Nacido el 24 de enero de 1928 en Brunoy, al sur de Francia, en el seno de una familia de carácter humilde, muy religiosa, Serrault inicialmente tenía vocación sacerdotal, por lo que ingresó en un seminario, aunque no llegó a ordenarse. Acabó decantándose por el mundo del espectáculo, por lo que entra a formar parte de una compañía teatral y acaba montando un número de cabaret, con su amigo el actor y guionista Jean Poiret, con el que ambos cosechan un gran éxito en los mejores locales de Francia. Serrault debuta en el cine en un brevísimo papel en la comedia Ah! les belles bacchantes!, y a continuación apareció como conserje en Las diabólicas. Aunque a partir de ese momento no le faltó trabajo, Serrault siempre dijo que durante 20 años se limitaba a aceptar cualquier papel, aunque muchas veces trabajó en películas de segunda fila. “Considero que todos esos trabajos fueron ejercicios de estilo, pues eran pruebas que me vi obligado a hacer directamente en la pantalla”. Aún así, se salva de la quema algún film, como La bella americana, El reposo del guerrero y El dinero de los demás.
La carrera de Michel Serrault empezó a despegar cuando el citado Poiret escribió la obra teatral ‘La jaula de las locas’, que arrasó en los escenarios, protagonizada por ambos. En 1978, Edouard Molinaro dirigió la versión cinematográfica, Vicios pequeños, donde Serrault compartía el protagonismo con Ugo Tognazzi. Tuvo tanto éxito que enseguida llegaron las secuelas, tituladas en España La jaula de las locas (1980) y La jaula de las locas: ellas se casan. Aunque desde ese momento solían proponerle más comedias, como Dos horas menos cuarto antes de Jesucristo, se esforzó por demostrar su valía para el drama (Garde à vue, L’ibis rouge) y la intriga (Los fantasmas del Chapelier, No despertar al policía que duerme). Nunca abandonó el teatro, pues cosechó éxitos sobre las tablas con representaciones de obras como ‘El avaro’, que protagonizó en 1986. En 1958 contrajo matrimonio con Juanita, con la que tuvo dos hijas, aunque la mayor falleció en accidente de coche en 1977. Poco se sabe de su vida privada, pues siempre fue un hombre discreto, aunque es un dato conocido que siempre mantuvo la fe.
A partir de los 90, Serrault se había convertido en un icono para los directores franceses, que le dieron papeles memorables. En 1997 protagonizó No va más, de Claude Chabrol, donde era un veterano timador que recorría Francia con su socia, interpretada por Isabelle Huppert. En Nelly y el señor Arnaud, de Claude Sautet, era un hombre mayor que transmite sus memorias a una joven endeudada. En Beaumarchais, el insolente, interpretó al monarca Luis XV. El actor realizó un trabajo especialmente memorable en La chica de París, donde encarnaba a un granjero viudo, algo cascarrabias, que se ve obligado a convivir con una joven. Su último trabajo de entidad fue Feliz Navidad, donde tenía un papel secundario. Nunca llegó a retirarse de las pantallas, pues unos meses antes de morir se estrenó Pars vite et reviens tard, un thriller, de Régis Wargnier. Hasta el presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha enviado sus condolencias a la viuda, calificando a Serrault como un “monumento del teatro, el cine y la televisión” y especificando que su filmografía “ha marcado a cada uno de los ciudadanos franceses”.