
Jennifer Lopez
53 añosLa reina del baile
Afamada por su atractivo y despreciada a menudo por la crítica, esta actriz y cantante es, sin embargo, adorada por el público de todo el mundo. La taquilla no engaña.
Y es que tiene un encanto exótico que pocas estrellas del espectáculo están en condiciones de emular. Su talento para cantar y contonearse es admirado en ciudades de todas las latitudes y ha conseguido ser la actriz latina mejor pagada del cine. Cierto es que la polémica la ha perseguido con frecuencia, cuando no era por un romance fracasado era por alguna película pisoteada con excesivo furor. Pero ella, mientras tanto, al tajo, es decir, a reventar las taquillas y las listas de discos más vendidos.
Pese al color de su piel, Jennifer Lynn López es norteamericana desde su más tierna infancia. Nació en Nueva York el 24 de julio de 1969, aunque eso sí, su tez de cacao proviene del origen de sus padres, emigrantes de Puerto Rico. La familia está compuesta por otras dos hermanas, Leslie y Lynda. Muy pronto, a los cinco años, la pequeña Jenni se puso a recibir clases de canto y de baile (no sabemos quién le enseñó pero habría que hacerle un monumento a la mejor maestra). Y eso de moverse por el escenario debió de atraparla de verdad, porque la López dejó los estudios y debutó con un pequeño papel adolescente en la película My Little Girl (1986). Decidida ya a hacer carrera en el cine, se marchó de casa y demostró su facilidad de movimientos interpretando a una bailarina en la serie televisiva In Living Color (2000), que fue un gran éxito. Posteriormente hizo breves papeles en distintos seriales, entre los que destacan Hotel Malibu o South Central, ambos de 1994, pero al año siguiente regresó al cine por la puerta grande gracias al fantástico drama My Family (1995), dirigido por Gregory Nava. Ese mismo año acompañaría a Wesley Snipes y a Woody Harrelson en la exitosa Asalto al tren del dinero, y seguidamente compartiría cartel con el gran Jack Nicholson en Sangre y vino.
Su despegue llegó con su primer papel protagonista. El biopic Selena (1997) le dio la oportunidad de volver a brillar con su voz y su cuerpo. La crítica se entusiasmó y fue nominada al Globo de Oro. Sin embargo, seguidamente cambió de registro y se apuntó a filmes más oscuros y moviditos: comenzó con Anaconda y con la fallida Giro al infierno, ambas de 1997, pero el gran pelotazo llegó con Un romance muy peligroso, thriller que protagonizó con George Clooney. Ambos se hicieron estrellas mediáticas gracias a este film dirigido por Steven Soderbergh, donde saltaban algo más que chispas entre ellos.
Pero aún estaba por llegar la reina de la fiesta, la estrella del pop, la Jennifer López que ha conquistado las pistas de baile. Grabó su primer disco en 1999, 'On the 6,' y temas como “Waiting For Tonight” o “If You Had My Love” se han convertido en clásicos de la noche. Hasta ahora ha editado dos álbumes más, donde su preciosa voz y sus bailables y pegadizos temas han conseguido un éxito apabullante. De todas maneras, ella es principalmente actriz y en los últimos tiempos así lo ha demostrado con un buen puñado de películas de gran acogida. Es verdad que la J. Lo que se gana al público no es la aguerrida mujer de La celda (2000) o Nunca más (2002), sino la chica romántica, de sonrisa radiante y explosiva naturalidad frente a la cámara. Así la vimos en Planes de boda (2001), junto a Matthew McConaughey, en Mirada de ángel (2001), con Jim Caviezel, o en la recientemente protagonizada por Richard Gere, ¿Bailamos? De todas formas, la vida de esta diva no ha sido fácil: ha pasado ya por dos divorcios, lo cual se nos antoja difícil de sobrellevar, y, ya en otro plano, la crítica ha disfrutado atacando las pelis que ha filmado con su ex Ben Affleck: Una relación peligrosa (2003), por la que incluso le dieron el premio Razzie a la peor actriz del año, y Una chica de Jersey (2004). Pero ella es una estrella, y tiene que lidiar con todas las consecuencias. La esperamos con ganas en La madre del novio, comedia romántica que contará además con la reaparición en el cine de Jane Fonda, tras quince años de ausencia.