
Sally Hawkins
46 añosPremios: 0 Oscar (más 1 premios y 2 nominaciones) Ver más
La mujer sonriente
Por su aspecto parece tan eternamente optimista como Poppy, el personaje que la ha hecho célebre, de la película Happy. Un cuento sobre la felicidad. Se diría que tiene mucho que ver con Poppy en la vida real, aunque es una actriz lo suficientemente versátil como para sacar adelante “lo que le echen”.
Nacida el 27 de abril de 1976 en la capital británica, Sally Hawkins es hija de Colin y Jacqui Hawkins, que tenían un gran prestigio como autores de libros infantiles. Desde su infancia era aficionada al cine, sobre todo a las películas en blanco y negro de los años 40. Estudió en el colegio James Allen para chicas, y se graduó en Arte Dramático, en la Royal Academy of Dramatic Arts.
Forjada en el teatro, a principios del siglo XXI Sally Hawkins apareció en montajes de obras clásicas, como “Mucho ruido y pocas nueces” y “El sueño de una noche de verano”, de William Shakespeare, y “La casa de Bernarda Alba”, del español Federico García Lorca.
Tras un par de apariciones intrascendentes en televisión y en el corto Post, Sally Hawkins debutó en el largometraje de la mano del hombre que se convertiría en el director más importante de su carrera, su compatriota Mike Leigh, que le ofreció un papel secundario importante en Todo o nada. Interpretaba a Samantha, una joven desempleada de clase baja.
En televisión, Sally Hawkins rodó varios telefilmes, y episodios de la serie satírica Little Britain. Pronto, Leigh volvió a reclutarla para el durísimo drama sobre el aborto El secreto de Vera Drake, donde era una muchacha embarazada que solicitaba los servicios de la protagonista, aparentemente un amable ama de casa, pero que en realidad practicaba abortos clandestinos.
Poco a poco, Sally Hawkins iba consagrándose como secundaria de altura. Fue la novia de un asesino a sueldo en Layer Cake, y Woody Allen la reclutó para interpretar a la prometida de Colin Farrell, endeudado por culpa de las apuestas, en Cassandra’s Dream.
Pero el papel que supondría un punto de inflexión en su carrera se lo brindaría nuevamente Mike Leigh. En Happy. Un cuento sobre la felicidad, bordó el papel de Poppy, vitalista maestra que se apunta a clases de conducir después de que le roben la bicicleta. Ganó con todo merecimiento el Oso de Plata en Berlín a la mejor actriz.
Quizás le cueste a Sally Hawkins que no la encasillen en el mismo tipo de personaje, como a Audrey Tautou con Amelie. De momento, intenta escoger papeles distintos, pues se la ha visto como secundaria en Flor del desierto, donde era una dependienta pesimista que aspira a convertirse en bailarina sin demasiada fe en sí misma. También tuvo una pequeña aparición en An Education, aunque conviene no desvelar en qué consiste exactamente su papel.
Repite con la protagonista de An Education, Carey Mulligan, en Never Let Me Go, drama de Mark Romanek basado en una novela de Kazuo Ishiguro. A continuación, ha rodado una curiosa mezcla entre comedia y terror que se titula It’s a Wonderful Afterlife, de la mano de Gurinder Chadha. No cabe duda de que está en un buen momento profesional.
Poco se sabe de la vida privada de Sally Hawkins, una mujer bastante discreta. El actor James Corden, que fue su compañero de reparto en Todo o nada, ha declarado que ha hecho un pacto con ella. “Si ambos llegamos a los 35 y no hemos encontrado a la pareja ideal, nos casaremos y tendremos muchos hijos”, explicó Corden.
Premios
Nominado a 1 premio
- Actriz principal La forma del agua
Nominado a 1 premio
- Actriz de reparto Blue Jasmine
Ganador de 1 premio
- Oso de Plata a la Mejor Actriz Happy. Un cuento sobre la felicidad