
Miguel Delibes
89 años ()El escritor de la nostalgia y el mundo rural
Fue uno de los grandes de la Literatura española. Retrató mejor que nadie la vida en el mundo rural del siglo XX, un mundo que se extinguía poco a poco. El escritor falleció el 12 de marzo de 2010, a los 89 años de edad, tras una larga enfermedad en su casa de Valladolid. En 1998 fue operado del cáncer de colon que padecía.
Nacido el 17 de octubre de 1920 en Valladolid, Miguel Delibes Setién fue el tercero de los ocho hijos de Alfonso Delibes, catedrático de Derecho, y María Setién. Al término de la Guerra Civil, se matriculó en la Escuela de Artes y Oficios, donde mejoró como dibujante, y acabó logrando un contrato como caricaturista en el periódico “El Norte de Castilla”.
Poco a poco fue integrándose en el periodismo en el citado diario. Empezó a escribir algún artículo, fue nombrado redactor, y llegó a encargarse de la sección de críticas de cine mientras seguía siendo el caricaturista. Finalmente, llegó a ser director del rotativo.
Tras contraer matrimonio con Ángeles de Castro, que fue su gran musa, empezó su carrera literaria. Debutó con “La sombra del ciprés es alargada”. Se consagró por completo con “El camino”, una mirada nostálgica a la infancia que está considerada hoy en día todo un clásico de obligada lectura. Después llegarían obras bien conocidas, como “Cinco horas con Mario”, “Las guerras de nuestros antepasados”, “El disputado voto del señor Cayo”, “Las ratas” y sobre todo “Los santos inocentes”, de 1981. Recibió el premio Príncipe de Asturias de las Letras, El Premio Nacional de Literatura, el Nadal y el Cervantes. Desde 1975 ocupaba el sillón “e” de la Real Academia Española.
1962 fue un gran año para Delibes. Publicó “Las ratas”, nació Camino, la última de sus siete hijos, y Ana Mariscal dirigió El camino (1963), lograda adaptación de su emblemática obra, con algunas actrices veteranas, como Julia Caba Alba y Mary Delgado, y jóvenes como Maribel Martín, o Juan Luis Galiardo, que debutaba en el largometraje.
En 1974 se rodó la poco conocida La mortaja, de José Antonio Páramo. La tercera adaptación para el cine de uno de sus libros correría a cargo del director que se convertiría en todo un especialista en llevar sus obras al cine. Se trata de Antonio Giménez Rico, que se adentró por primera vez en la obra del escritor con Retrato de familia, versión cinematográfica de “Mi idolatrado hijo Sisi”. Giménez Rico también llevó al cine El disputado voto del señor Cayo yLas ratas, una correcta adaptación que posiblemente sea la mejor película del director, con José Caride realizando una brillante interpretación de “El Ratero”, inolvidable personaje de Delibes.
Por su parte Antonio Mercero obtuvo un gran éxito con La guerra de papá, basada en “El príncipe destronado”. El autor de La cabina versionó también El tesoro.
Josefina Molina, que había rodado otra versión de “El camino” para la televisión, fue la responsable de Función de noche, que recogía la versión teatral de “Cinco horas con Mario”. Luis Alcoriza rodó La sombra del ciprés es alargada, y Francesc Beltriu dirigió Una pareja perfecta, que se basaba en “Diario de un jubilado”. Hasta la fecha es la última incursión fílmica en la obra del genial autor.
La más redonda adaptación jamás filmada de un libro de Delibes es Los santos inocentes, de Mario Camus, que supo plasmar en la pantalla la esencia de un libro muy intenso, que retrataba la vida en el campo extremeño de una humilde familia. Francisco Rabal realizaba una deslumbrante interpretación de Azarías, disminuido psíquico que se encariña con un ave a la que llama “milana bonita”. Y Alfredo Landa ofrecía uno de sus mejores trabajos com Paco el bajo, el cabeza de familia. Ambos actores recibieron ex aequo el premio de interpretación en Cannes, donde la cinta también recibió una mención especial por parte del Jurado Ecumménico, en una de las mayores hazañas del cine español hasta la fecha.